Hacía tiempo ya que @madridironico me había propuesto una colaboración y ¡cómo decir que no!, la próxima temporada será la de las colaboraciones y, qué mejor manera que empezar que en @madridironico, con quien compartí este mundo 3.0 desde el principio. La mejor opción que se me ocurrió fue un resumen del 2014, todo a toro pasado sí, pero con la temporada acabada y superados todos los escollos… esto sería mucho mejor.
La temporada no empezó bien y el que más y el que menos no confiaba en la nueva campaña sin Mourinho. Por un lado nada había cambiado, la prensa vio en Ancelotti una salvación para no sacar sus manos de nuestro equipo y dieron cuartelillo a sus decisiones salomónicas. Por otro lado, los madridistas -pero los de verdad, entre los que me incluyo- optamos por lo que siempre habíamos pedido, continuidad fuera quien fuera el que presidiera
Paciencia, paciencia y paciencia me repetía cada fin de semana que veía los partidos entre pipas, cada lunes que llegaba al trabajo…hasta que de repente, un nuevo mundo se abrió ante mí: madridismo en tuiter convertido a madridismo real, del que se puede tocar y abrazar.
Siempre habrá un antes y un después del partido en casa contra el Barça. ¿Irónico? Puede ser, pero supuso una manera de vivir los partidos y mi madridismo como siempre había soñado.
Muy bonito, políticamente correcto y todo lo que quieran decir, pero los partidos del Real Madrid y especialmente, de unos años para acá, son para verlos con madridistas que compartan mi pasión, me entiendan y no me juzguen por hacerlo así.
Todos esos que me juzgan no saben lo que es escuchar día tras día “pero ¿aún sigues siendo de Mou?”, pero ¿quiénes son ellos para creer que solo su opinión es válida? Algunos no somos una veleta al son del mejor viento… no, algunos sentimos el fútbol como lo que es, pasión y entrega al 100%. Aquellos que critican por creer que no tenemos vida ajena al fútbol, les diré en torno a que gira su vida, ¿política? ¿amor? , ¿dónde están escritas esas incompatibilidades? Igual ese día no fui a clase.
La temporada comenzó a ser como años anteriores, críticas, puntos que se nos escapaban entre los dedos y vecinos inflándose cada día más.
Casi sin darnos cuenta llegó Semana Santa y una carrera de Bale nos hizo arrodillarnos como si a Dios rezáramos y ¡vaya si rezamos y vivimos nuestra religión sin restricciones! Una hernia nos daba la Copa frente a equipo del país pequeñito que se iba a ir convirtiendo en un pequeño garbancito que algunos seguían adorando…
La bilis comenzó a emerger sin saber que faltaba lo mejor. Escribimos un nuevo capítulo para la Historia en Múnich, con un canelita que nos daba el pase a la final callándonos la boca a muchos. Esas bocas que volvíamos a abrir en cada uno de los partidos de Liga que entregábamos a los rivales sin saber, que sus cabezas estaban muy lejos de ahí, estaban en una galaxia muy lejana a la que solo el Madrid puede llegar.
Los rivales se peleaban entre ellos mientras nosotros trabajábamos por nuestro escudo y en el minuto 92 -sin ser el 93- el mundo se paró, madridistas repartidos por cada esquina del mundo sufrimos un infarto colectivo que nos devolvía al sitio del que no deberíamos habernos ido nunca … Canelita ascendiendo a capitán merecido por vivir su alegría paterna en el campo , le animamos a paternidad por año, Bale demostrando que las hernias
permiten volar, Marcelo que las hamburguesas no son tan malas como nos las venden y Cristiano, que su lesión no le hizo borrarse del partido como a otros …
DIEZ COPAS DE EUROPA, en blanco y negro, color, botijos o copitas, nuestra HISTORIA se escribe con R, de REAL MADRID, porque esto aunque aún no lo creamos es REAL …
A quien no le guste que busque donde esconderse…
¡¡ HALA MADRID HIJOS DE PUTA !!